
Grese en una fotografía del Gobierno británico (Agosto de 1945). Imagen de dominio público
Grese según sus víctimas
En el relato hay datos ciertos y las fechas son exactas. Pero conviene leer otras informaciones como las del libro “Los hornos de Hitler” escrito por una superviviente que tuvo la desgracia de caer en un campo vigilado por el ángel rubio de Auschwitz. El siguiente es un extracto del citado texto no apto para personas sensibles:
“Por aquel entonces, las "selecciones" eran llevadas a cabo por las más altas jerarquías femeninas del campo, Hasse e Irma Griese. Los lunes, miércoles y sábados, duraban las revistas desde el amanecer hasta que expiraba la tarde, hora en que tenían ya completa su cuota de víctimas. Cuando aquellas dos mujeres se presentaban a la entrada del campo, las internadas, quienes ya sabían lo que les esperaba, se echaban a temblar. Irma Griese se adelantaba hacia las prisioneras con su andar ondulante y sus caderas en movimiento. Los ojos de las cuarenta mil desventuradas mujeres, mudas e inmóviles, se clavaban en ella. Era de estatura mediana, estaba elegantemente ataviada y tenía el cabello impecablemente arreglado. El terror mortal inspirado por su presencia la complacía indudablemente y la deleitaba. Porque aquella muchacha de veintidós años carecía en absoluto de entrañas. Con mano segura escogía a sus víctimas, no sólo de entre las sanas, sino de entre las enfermas, débiles e incapacitadas. Las que, a pesar de su hambre y penalidades, seguían manifestando un poco de su belleza física anterior eran las primeras en ser seleccionadas. Constituían los blancos especiales de la atención de Irma Griese. Durante las "selecciones", el "ángel rubio de Belsen", como más adelante había de llamarla la prensa, manejaba con liberalidad su látigo. Sacudía fustazos adonde se le antojaba, y a nosotras no nos tocaba más que aguantar lo mejor que pudiésemos.
Nuestras contorsiones de dolor y la sangre que derramábamos la hacían sonreír. ¡Qué dentadura más impecable tenía! ¡Sus dientes parecían perlas!”.
PERSONAJE SINIESTRO.
Se dice que tras su detención en su apartamento se encontraron lámparas forradas de piel humana, “exactamente de tres prisioneros judíos asesinados y despellejado por ella misma”, y aunque sea difícil dilucidar dónde comienza la leyenda, estos relatos dan idea del cariz de este personaje. Grese fue condenada a la horca a los 22 años siendo la más joven condenada a muerte por las leyes británicas en el siglo XX. Se le ejecutó en la prisión alemana de Hamelín y sus últimas palabras a su verdugo habrían sido “¡rápido!”. Un ejemplo de cristiano, como ha dejado bien claro el diario La Razón.
No se me escapa una mirada y esa mujer tiene la mirada fría de su líder, y los ojos saltones y conturbados por la represión inconsciente de todos sus instintos de amor y deseo, esa mujer es malvada.
ResponderEliminarY el periódico La Razón tiene un nombre "ignominioso".
Así es, este tipo de actos no tiene nombre.
ResponderEliminarTe he agreado en mi blog. Gracias por tu comentario.